Piso en calle Asturias

El ático, respondía a una tipología convencional propia de la arquitectura residencial de los años 80. Era un laberinto caótico de habitaciones, pasillos estrechos y techos bajos.

Sin duda, las grandes posibilidades de la reforma giraban en torno a la terraza, y al descubrimiento de la estructura metálica oculta, que aportaban cierto valor a la intervención.

La prioridad, ha sido buscar hacer protagonista del interior la terraza, y crear un espacio diáfano y luminoso que además permitiera exponer la colección de pintura del propietario.

Se ordenó la distribución de manera que se liberase el mayor espacio posible, orientando el programa de día desde la luz de la terraza, en un mismo espacio diáfano, hasta la sombra mas privada de la parte trasera, donde se ubica el área de dormitorios.

Para potenciar la continuidad entre interior y exterior se propone además una ampliación de la zona de día mediante la inserción de un cubo con cerramiento y cubierta de vidrio planteado para ofrecer un espacio polivalente en el que trabajar, comer o estar.